Son muchos los credos en el mundo, que reflejan a su dios o dioses con imágenes humanas o de elementos de la naturaleza. Inclusive en la tradición cristiana, se ha representado a Dios a través de imágenes. En ambos casos, los feligreses han sido llevados a adorar a Dios o sus dioses a través de dichas imágenes. En la cristiandad, no solo se adora a las imágenes representativas de Jesús, sino también de aquellos personajes relevantes de la historia del cristianismo, que han sido canonizados o beatificados y colocados prácticamente a la par de Jesucristo como mediadores entre Dios y los hombres.
Hoy quiero llamar tu atención sobre este hecho con la letra de una canción que me ha impactado mucho y que a continuación transcribo, además de colocar un video de la misma en la sección “Video Recomendado”.
Al final de la letra de la canción mencionada, también cito algunos pasajes bíblicos relacionados. Con mucho respeto te invito a leer esto y a ver el video.
Qué imagen me vas a hacer
si no sabes mis medidas;
si te fueses a los montes
madera te faltaría.
Qué imagen me vas a hacer
si no sabes mis medidas;
si de piedras las hicieras
piedras te faltarían.
Mis caminos no son tus caminos,
tú no piensas como yo pienso,
nos separa una gran montaña,
tus ideas y tus intentos.
Soy el Todopoderoso
hecho carne y sufrimiento.
No me podrás medir
por lo grande de mis hechos.
CORO
No me puedes medir,
yo soy el que soy.
No me puedes medir,
yo soy la eternidad.
No me puedes medir,
por la historia.
No me puedes medir,
por un milagro más.
Ni todo el oro del mundo
alcanzará para mis medidas;
yo soy quien sostiene el mundo
y sostiene tu vida.
Qué imagen me vas a hacer
si no sabes mis medidas;
si la tierra por mi tiembla
y las tinieblas se disipan.
Qué imagen me vas a hacer
si no sabes mis medidas;
soy el Alfa y la Omega,
soy el que te da la vida.
“No adores otros dioses además de mí. No hagas para ti ninguna imagen ni nada parecido de lo que hay arriba en cielo, ni de lo que hay abajo en la tierra, ni de lo que hay en el mar debajo de la tierra. No te inclines ante ellos ni los adores porque yo, el Señor tu Dios, soy un Dios celoso.” (Exodo 20:3-5)